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22 Cuyas signaturas en el Archivo General de Indias son: AGI, Contratación, 5575, N.8; AGI, Contratación, 197, N. 21, 1: AGI, Contratación, 197, N.212; yAGI, Contratación, 197, N. 21, 3; sorting the deceased’s assets in the spanish colonies (c. 1550) Hemos podido analizar 4 expedientes completos,22 todos traslados realizados por Miguel López, escribano mayor del cabildo de Ciudad de México, que nos han mostrado la variada casuística que podía encontrarse tras estos autos de bienes de difuntos. Se trata de un auto de los bienes de Juan López, soldado portugués que falleció de heridas de guerra en el pueblo de Amacueca, Jalisco, en 1541 (Expediente 1), el de un mulatero burgalés que murió en Ciudad de México en 1545 dejando un hijo menor de edad (Expediente 2), el de Pedro de Tudela, que falleció en la ciudad de los Ángeles en 1543 (Expediente 3) y el de Bartolomé González, muerto en 1537 en las minas de Zacatlán, teniendo una hija natural, pero sin haber dejado hecho su testamento (Expediente 4). Pese a las diferentes fechas de óbito, todos los procesos se resolvieron en 1545, mientras el juez visitador se encontraba en Ciudad de México, poniendo al día estos asuntos. La estructura de estos expedientes es bastante similar. Todo el auto de bienes de difuntos se encuentra redactado bajo la forma de un acta en la que el escribano del cabildo, actuando en su faceta de escribano del juzgado de difuntos, da testimonio de los hechos acaecidos ante él, de manera que quede constancia fehaciente de cómo se desarrolló el proceso. Lo más frecuente es que se inicien con unmandamiento del juez visitador dando orden de que se lleve a cabo alguna acción que ponga en funcionamiento el proceso. Normalmente, ordena que sean presentados ante sí los documentos relativos a los bienes de cierto fallecido, aunque también puede encomendar esta misión a otro juez, como sucede en el expediente 3, donde el encargado de supervisar el inventario y la almoneda será el juez de residencia de la ciudad de los Ángeles. Así pues, ya desde este primer documento, empezamos a tomar conciencia de la diversidad de situaciones y, por tanto, de documentos, que pueden darse durante la gestión de los bienes de un difunto. De la primera de estas órdenes, la del expediente 1, sólo tenemos constancia por referencias, ya que es mencio610

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